martes, 30 de agosto de 2016

ABANDONO ESCOLAR TEMPRANO

Hay un consenso generalizado entre los economistas de que la educación y la calidad de las instituciones explican en torno al 90% de las diferencias en los niveles de rentas entre los países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). La mejora del potencial humano influye en la remuneración, empleabilidad y productividad de los trabajadores, puesto que favorece la innovación y el incremento de los capitales físico y tecnológico.


Por desgracia, España es líder europeo en abandono escolar temprano, es decir, en la proporción de jóvenes de 18 a 24 años que han abandonado las aulas sin cursar Bachillerato ni Formación Profesional.

Vemos en el gráfico que, con datos de 2015, uno de cada cinco españoles (20%) de esas edades solo ha cursado el nivel de estudios obligatorios para afrontar la vida y enfrentarse a un mercado laboral que se está complicando. La media europea es del 11% y la Comunidad Autónoma Vasca se sitúa en el 9,7%

La evaluación PISA 2012 advertía que España ocupaba en las tres competencias analizadas (lectura, matemáticas y ciencias) los puestos 23, 25 y 21, respectivamente, entre los 34 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), posiciones parecidas a las obtenidas en las cuatro ediciones realizadas desde el año 2000.

En cuanto a las habilidades prácticas, en los siguientes gráficos tenemos la posición que ocupa España:
Los alumnos de bajo nivel representan un 26,2% en España frente a la media del 17,6% en los países de la OCDE, y los de nivel excelente suponen el 3,4%, cuando en el conjunto de los países llegan al 8%. 

En España se tendrá que llegar a un gran acuerdo en educación entre todas las fuerzas políticas y sociales para conseguir una mejora sustancial de los resultados del sistema educativo. Expertos en educación señalan, entre otras, la necesidad de reducir a la mitad el abandono educativo temprano, mejorar la puntuación obtenida en la evaluación PISA, desarrollar nuevas habilidades y aumentar el gasto público en educación, que en el 2012 había descendido al 4,55% del PIB, hasta el 5%. La mejora del potencial humano puede ser una de las mejores estrategias para el progreso del país.

martes, 23 de agosto de 2016

CONDICIONANTES DE LA INVERSIÓN

El desglose correspondiente a la Contabilidad Nacional española del segundo trimestre confirma la continuación de la fase expansiva, pero señala el descenso de la contribución de la demanda nacional o interna, que incluye el gasto en consumo y la formación bruta de capital (inversión). 

La inversión empresarial abarca dos componentes: la formación bruta de capital fijo (edificios, maquinaria, elementos de transporte, etc) y la variación de las existencias. Entre ambos conforman la parte del nuevo valor añadido de la economía que se invierte en lugar de consumirse. 

Por los datos que aporta el Banco de España, mientras que el avance del PIB del segundo trimestre desciende del 0,8% en el 2015 al 0,7% en el año actual, la contribución de la demanda interna cae de modo más pronunciado. España todavía no ha vuelto a alcanzar los niveles de renta per cápita de 2008, dado que en el conjunto del período 2008-2015, mientras los países de la Eurozona crecieron en promedio un 12,6%, el PIB de España cayó un 0,6%. 

En el conjunto de los países desarrollados, a pesar del extraordinario apoyo financiero de los bancos centrales con la masiva compra de bonos (flexibilización cuantitativa), la economía mundial no está en buen estado. Se constata que el sector empresarial ha reducido la inversión en relación con el PIB en los últimos años. 

Las causas pueden ser el envejecimiento de la población, la reducción del potencial de crecimiento, la innovación tecnológica, que reduce la necesidad de capital, y la forma de retribuir a los directivos, que muchas veces ya no depende del esfuerzo inversor realizado sino del precio de las acciones. 

Como el bajo nivel de inversión puede lastrar la recuperación económica, el Banco Central Europeo ha realizado una encuesta entre grandes empresas para conocer sobre el terreno los motivos del descenso en las inversiones.

En el siguiente gráfico se recogen las respuestas de los empresarios:


Las empresas responden que la falta de inversión obedece en primer lugar a la ausencia de demanda, seguido de las expectativas no muy favorables y la sobrecapacidad productiva de las instalaciones empresariales.

La preocupación por la incidencia de los costes laborales en las decisiones de inversión, un argumento que ha sido utilizado para provocar la devaluación salarial y los ajustes en los gastos sociales, aparece situada en la posición séptima, y el cambio en la regulación del mercado laboral queda relegado al décimo lugar.

martes, 16 de agosto de 2016

RENTA MÍNIMA

Los secretarios generales de los dos grandes sindicatos españoles (UGT y CC.OO) han presentado recientemente al Congreso de los Diputados para su tramitación como Iniciativa Legislativa Popular las cerca de 700.000 firmas que se han conseguido para reclamar una renta mínima para los desempleados que carecen de ingresos. 

La iniciativa busca establecer un nuevo derecho subjetivo, vinculado a la Seguridad Social y financiado a través de los Presupuestos Generales del Estado, que permita dotar a los beneficiarios con una cuota mensual de 426 euros. No sería una renta básica de ciudadanía, sino una renta mínima para desempleados, por lo que la percepción estaría vinculada a la búsqueda de un puesto de trabajo o la participación en programas de inserción laboral.

El desempleo es uno de los mayores estigmas de la sociedad española. Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en el segundo trimestre de 2016 había 4.574.700 parados (20%) y la prestación de desempleo está cubriendo únicamente en torno al 53% de los parados. Los hogares que tenían a todos sus miembros activos en desempleo en ese trimestre alcanzaban los 1.493.800

En el siguiente gráfico tenemos la evolución de los desempleados, desglosado por el tiempo de paro:

Observamos que, a medida que va reduciéndose, el paro se cronifica, incrementándose ligeramente la proporción de desempleados de larga duración (más de 1 año), que en el segundo trimestre de 2016 alcanza el 58% del desempleo total, en tanto que los correspondientes a muy larga duración (más de 2 años) se sitúa en el 43% 

Esta preocupante situación en la mitad de los desempleados está relacionada con la escasa efectividad de los recursos dedicados a las Políticas Activas de Empleo, que impide mejorar la empleabilidad y facilitar la salida del paro a los desempleados de larga duración. 

Un reciente informe de la Fundación Foessa analiza la transmisión intergeneracional de la pobreza. Los estudios muestran una fuerte asociación entre las condiciones de vida de padres e hijos. Se constata la dificultad de una generación que ha vivido sus primeros pasos en una familia en situación de pobreza, para generar un cambio en el nivel socioeconómico con relación a la generación anterior. No resulta extraño que los centros de servicios sociales están asistiendo a nietos de aquellos que atendieron hace 30 años, previo paso de los padres.

La iniciativa de los sindicatos puede ser un primer paso hacia la Renta Básica Universal. Dado el desequilibrio entre la demanda y la oferta de trabajo, va a ser necesario garantizar un ingreso mínimo a toda la población de forma individualizada e incondicional, como un pilar de la igualdad de oportunidades, que rompa la cadena de transmisión intergeneracional de la pobreza y sea un instrumento para defender el deterioro de las condiciones de vida.

martes, 2 de agosto de 2016

EL RETO DE LA ECONOMÍA COLABORATIVA

La economía colaborativa es una tendencia tecnológica que supone un cambio de paradigma, porque plantea que los ciudadanos dejen de ser únicamente consumidores de bienes y servicios para compartir sus recursos con otros usuarios a cambio de una remuneración. La innovación técnica que utiliza no es más que una aplicación informática de web y móvil.

En los últimos años, la popularización de internet ha ido cambiando la forma de aprender, comunicarnos o entretenernos, accediendo a recursos tales como Wikipedia, YouTube y Android. Se está digitalizando el mundo físico y crecen las interconexiones, tanto entre personas como entre aparatos.

Posiblemente la mayoría de las necesidades actuales se podrían atender sin recurrir a mayor producción. Las primeras acciones del modelo colaborativo están siendo compartir coche y alojarse en casas ajenas. Pero, dada la infrautilización de otros muchos recursos, no son más que los primeros pasos para un uso más racional de los mismos.


Se estima que el sector industrial puede tener más del 20% de su capacidad infrautilizada, un porcentaje similar de los puestos de trabajo de las oficinas están sin ocupar y una cuarta parte de los camiones viajan vacíos cada día. La infrautilización de la capacidad productiva afecta negativamente a las cuentas de resultados de las empresas 

Por ello, aparte de que los ciudadanos puedan obtener unos ingresos extra prestando servicios puntuales, la alternativa colaborativa está siendo desarrollada por empresas que ofrecen este tipo de servicios o que sirven de punto de apoyo entre usuarios utilizando plataformas digitales que crean lo que se denominan “mercados de múltiples lados”, en los que diferentes tipos de agentes intercambian servicios

Algunas de las empresas más conocidas del modelo colaborativo son Airbnb, líder mundial en alojamiento; Rentalia, un portal de alquiler vacacional, Uber y Blablacar, que conectan conductores con plazas disponibles con pasajeros interesados en un mismo recorrido, y plataformas como Instacart o Delivery Hero en el sector de la distribución.

La evolución de la economía colaborativa puede ser muy rápida y, aunque no vaya a destacar en la creación de empleo, tendrá notables efectos socioeconómicos, porque a su novedad tecnológica se une la percepción cada vez mayor de su necesidad en un planeta con recursos limitados. 

Está claro que las plataformas digitales permiten crear nuevos y mejores servicios, que utilizan los recursos, a menudo escasos, de una manera más eficiente, y pueden llegar a mayor cantidad de usuarios, así como soportar más proveedores, mejorando la productividad y creando más riqueza.

Pero como la Unión Europea exige que se cumplan las normas establecidas para asegurar que todos los agentes compiten en condiciones de igualdad, el reto para las instituciones es decidir el tratamiento que se debe dar a un nuevo actor que se quiere introducir en el mercado con un modelo diferente, usando tecnologías que dejan obsoletas las reglas establecidas. La respuesta que se dé a este planteamiento va a ser una de las claves para el desarrollo de la economía colaborativa